Archivo para abril, 2013

hogan_german_short_haired_pointer_01.jpg_w450En la jerga popular, la mención de los perros adquiere valoraciones pendulares, que van de un extremo a otro  casi sin detenciones intermedias; por ejemplo: “Qué vida de perros”; “Lo tratan como a un perro”; “Lo mataron como a un perro”; “Es más despreciable que perro sarnoso”; “Tiene un carácter de perros”,  y así podríamos continuar con una larga lista de expresiones en el sector negativo. Y en la otra punta, la positiva, encontramos manifestaciones tales como: “El perro es el mejor amigo del hombre”; “El perro es lazarillo de los discapacitados”; “Más conozco a las personas y más quiero a mi perro”; etc.

 También los sitios intermedios, pero con menor intensidad, están marcados por algunas  reflexiones como las siguientes: “El perro es el mejor amigo del hombre; pero éste no siempre  es el mejor amigo del perro”; “Perro que ladra no muerde”; “Ladrador como perro chico”; etc. (más…)

peon-ruEs una historia real. Transcurría la década del ´70 cuando una familia chacarera, residente en la zona de Luxardo, contrató un peón para que realizara distintas tareas en su campo; él era gringo, medio petiso, de unos 60 años de edad, su cara  muy roja mostraba  los embates del sol y la sangre a flor de piel, con grandes ojos grises y  de mirada penetrante; se llamaba Juan y tenía un alias, le decían “Yuanín  l` mat” (Juancito, el loco). Su personalidad poseía singulares aptitudes, tales como  gran voluntad para el trabajo, sin importar el tiempo y la diversidad de las obligaciones  encomendadas; además de una credulidad  casi ilimitada, en especial sobre temas relacionados con mujeres jóvenes, en este rubro “comía todo lo que le tiraban”. Por eso, nunca faltaron bromistas y “gorros de lana” que le calentaron la cabeza con frondosas ilusiones, donde alguna joven del entorno sería protagonista involuntaria de una novela de amor; aunque, por lo general, ella no participara con su presencia y, a veces, ni siquiera se enteraba del romance; pues todo se elaboraba sólo en la imaginación de Yuanín y de su eventual embaucador. (más…)

immigrant_hostelEsta breve exposición contiene un sencillo homenaje, a través del recuerdo, para todos los hombres y mujeres que provenían de lejanas tierras, impulsados por la miseria en sus países de origen o, simplemente, motivados por ambiciones personales de aventura y riqueza en breve; y de este modo arribaron a nuestras playas colmados de esperanzas nuevas.

El primer antecedente data del año 1825, en que se constituyó en “hotel” una parte del antiguo convento de los Recoletos, zona del actual cementerio homónimo, donde alojaron a grupos de ingleses luego destinados a San Pedro. En este lugar también se estableció la primera Escuela de Agricultura y Jardín de Aclimatación. Al que agregaron, más tarde, el edificio de la antigua capilla de la “Chacarita de los Colegiales”; éste conjunto funcionaría como alojamiento de inmigrantes hasta 1852. Sin embargo, corresponde agregar que en tal  período los inmigrantes apenas superaban los 3000 en promedio y por año. (más…)