Mié 25 Mar 2015
Del hogar a la Escuela
Posteado por Carlos Evasio Maggi en Propuestas
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Para todo individuo, durante el tramo inicial de su existencia, el hogar conformado por los padres debería ser el ámbito irreemplazable donde realmente fomenta su educación básica, además es el tiempo en que adquiere signos de comportamiento que lo marcarán para toda la vida. Puesto que con un poco de genes y otro poco de usos y costumbres, los padres van moldeando el carácter de su prole. Y al respecto afirmaba el filósofo Lucio A. Séneca: “Lo que de raíz se aprende nunca del todo se olvida”. Luego la Escuela será la encargada de continuar y complementar esa acción formativa en cada persona, desde el ciclo primario, cuyo programa educativo se elabora con el propósito de ampliar y perfeccionar el componente cultural que comenzó en el propio hogar. Todo lo cual tiende a favorecer la inserción social de cada uno, pues equivale a crear una conducta individual civilizada, y también permite elevar los conocimientos para beneficio personal y del conjunto social. Por consiguiente, es importante destacar también y como contrapartida, el peligro que presenta la exposición prolongada en la calle para un niño o adolescente, cuya situación adquiere mayor gravedad si no se halla acompañado de sus padres o personas adultas que lo contengan, pues no está dotado aún de los parámetros en su conducta, necesarios para distinguir con claridad entre el bien y el mal.
Por ello, es fundamental la primera etapa, familiar y escolar, dado que estos lugares siempre contribuyen a diseñar rasgos de comportamiento que acompañarán al niño por el resto de su existencia. Sin embargo, conviene destacar incluso que cada ejemplo vale más que mil palabras, debido a que el sujeto tiende naturalmente a copiar conductas, y esta predisposición es un eterno atributo. “Largo es el camino de la enseñanza por medio de teorías, breve y eficaz por medio de ejemplos”, sostenía Séneca. Y para una correcta formación, desde la propia casa deberían difundirse ejemplos sobre valores esenciales de la vida, tales como: amor a la familia, respeto al prójimo, la trascendencia del estudio, del trabajo, el orden constituido; además del patrimonio cultural de nuestro pueblo y el cuidado del medio ambiente. Al respecto decía el filósofo holandés, Baruch Spinoza: “La actividad más importante que un ser humano puede lograr es aprender para entender, porque entender es ser libre”.
En consecuencia, desde una formación importante, la vida transcurrirá más linda, cuyo estado emocional embarga al titular de tal conducta y luego se propaga al prójimo como un halo de buena onda que a todos favorece, porque es el único modo de construir una sociedad civilizada, donde la convivencia es una decorosa necesidad y no una carga de problemas desagradables. Con tal propósito cuesta tan poco fomentar el orden y está al alcance de todos, sin excepciones, pues las puertas del destino permanecen eternamente abiertas para todo el mundo, solo es cuestión de estimar las conductas lógicas que nos permitirán transitar nuestro camino de la mejor manera, individual y socialmente.
Y si a pesar de todo, las dudas acuden a nuestro pensamiento, desde que somos padres o en la etapa de educandos, con solo observar el comportamiento de la naturaleza que, en sentido amplio, nos mostrará una senda, la que nunca falla, pues cuenta con la perfección funcional, creada durante los siglos transcurridos, y que ni los animales ni los vegetales desdeñaron jamás, dado que en la eterna construcción, la naturaleza nunca obró con intenciones extrañas subyacentes y siempre tendió a perfeccionar las cosas. Finalmente, el filósofo griego Aristóteles, aseveraba: “La naturaleza no hace nada en vano”.
Contador, deseo expresar, como docente de nivel 1º,que llevo muchos años en la enseñanza y por eso creo conocer muy bien la realidad de la educación. En consecuencia, no pude más que disfrutar la certeza de sus valoraciones. Muy bueno lo suyo!
Lo felicito por su realismo reflexivo. También soy docente con casi 30 años de servicio. Mil gracias.
Hola Carlos, es imposible no coincidir con tus manifestaciones.
Te agradecería si destinas algunas palabras escritas en destacar los bajos sueldos de los docentes primarios, en especial de los maestros de escuelas rurales, que tanto sacrificio realizan para cumplir su función. Saludos de Rosana.
Hola. Quiero decir que muy pocas veces se exalta la importancia, que el vital, de la escuela primaria. Es más, en Córdoba hubo un gobernador que las cerraba, en especial si eran escuelas rurales.Para qué agregar algo más…
Hola. Es verdad lo que dice Beatriz, yo tengo el gran orgullo de ser docente rural con 28 años de servicios y un gobernador fusiono varias escuelas rurales, sin importar si los alumnos quedaban a la deriva y el sacrificio que debían hacer para llegar a una escuela, mas cercana.
Agradezco y valoro sus palabras.-
Es evidente (lamentablemente) que el populismo destruye los valores cívicos. Y entre otros, la cultura.Por eso ir a clases es «secundario», es prescindible. Y para eso siempre tienen una excusa, ahora la pandemia, en el perído anterior los «sueldos bajos»…Mejor, me detengo aquí.